sábado, 26 de marzo de 2016

María Teresa de Silva Álvarez de Toledo - Wikipedia, la enciclopedia libre

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María Teresa de Silva Álvarez de Toledo
XIII duquesa de Alba de Tormes
Goya Alba1.jpg

La Duquesa de Alba de Tormes, retratada por Francisco de Goya en 1795. Palacio de Liria, Fundación Casa de Alba.
Jefa de la Casa de Alba
15 de noviembre de 1776-23 de julio de 1802
Predecesor Fernando de Silva y Álvarez de Toledo
Sucesor Carlos Miguel Fitz-James Stuart y Silva

Información personal
Nombre secular María del Pilar Teresa Cayetana de Silva Álvarez de Toledo y Silva-Bazán
Otros títulos Véase Títulos nobiliarios
Nacimiento 10 de junio de 1762

Sevilla, Bandera de España España
Fallecimiento 23 de julio de 1802 (40 años)

Palacio de Buenavista, Madrid, Bandera de España España
Entierro
Familia
Dinastía Casa de Silva

Casa de Toledo
Padre Francisco de Paula de Silva Álvarez de Toledo, X duque de Huéscar
Madre Mariana de Silva-Bazán y Sarmiento
Consorte José Álvarez de Toledo, XI marqués de Villafranca del Bierzo y XV duque de Medina Sidonia

Coat of arms of the House of Alvarez de Toledo, duchy of Alba de Tormes, Grandee of Spain.svg

Escudo de María Teresa de Silva Álvarez de Toledo


[editar datos en Wikidata]
María Teresa de Silva Álvarez de Toledon 1 (Sevilla, 10 de junio de 1762-Madrid, 23 de julio de 1802) fue una noble española, XIII duquesa de Alba de Tormes por derecho propio y grande de España.



Índice

Biografía

Infancia

María Teresa de Silva Álvarez de Toledo, llamada comúnmente Cayetana, fue la hija única de Francisco de Paula de Silva y Álvarez de Toledo, X duque de Huéscar (hijo a su vez de Fernando de Silva y Álvarez de Toledo, XII duque de Alba de Tormes y de su esposa Ana María Álvarez de Toledo Portugal, XII condesa de Oropesa) y de María del Pilar Ana de Silva-Bazán y Sarmiento (hija a su vez de Pedro de Silva-Bazán y Alagón y de María Cayetana Sarmiento y Dávila, XVIII marqueses de Santa Cruz de Mudela).


Su infancia fue triste y dura, marcada principalmente por el desapego
de sus padres, dados más a la vida licenciosa que a la familiar.


Su padre murió en abril de 1770, cuando ella contaba solamente con ocho años, haciéndola futura heredera de todos sus títulos de nobleza y de sus inmensas propiedades. Cinco años después, en 1775, su madre se prometió con José María Pignatelli de Aragón y Gonzaga, III duque de Solferino, pero la muerte repentina del duque trastocó sus planes y finalmente contrajo matrimonio con el padre de éste, Joaquín Anastasio Pignatelli de Aragón y Moncayo, XVI conde de Fuentes, VI marqués de Mora y IV marqués de Cascojuela. Esta boda, que no fue la última de Mariana de Silva-Bazán, se celebró el mismo día que la boda de su hija Cayetana. En 1776, su madre enviudó de nuevo, y poco después, el 1 de enero de 1778, contrajo su tercer y último matrimonio con el XI duque de Arcos, Antonio Ponce de León y Spínola de la Cerda.


Matrimonio


Con el fin de preservar los dos ducados españoles más poderosos, el de Alba de Tormes y el de Medina Sidonia, atados a la familia Álvarez de Toledo, el abuelo de Cayetana la casó en 1775, a los doce años de edad, con su primo, José Álvarez de Toledo y Gonzaga, XI marqués de Villafranca del Bierzo y futuro XV duque de Medina Sidonia –título aún más antiguo que el de Alba, representante de la línea segundogénita masculina del II duque de Alba de Tormes, Fadrique Álvarez de Toledo y Enríquez– y arquetipo del aristócrata ilustrado.1 El matrimonio se convirtió en el más poderoso, acaudalado y titulado del Reino de España, en constante competencia con los duques de Osuna.


Cayetana y su familia vivieron a caballo entre sus dos más importantes propiedades madrileñas, el Palacio de la Moncloa y el Palacio de Buenavista, cerca de la fuente de Cibeles, mandado edificar por su abuelo sobre unos terrenos adquiridos a la Casa Real en la testamentaría de Isabel de Farnesio y que hoy en día alberga el Cuartel General del Ejército de España.


La duquesa de Alba acostumbraba también alternar estas residencias con una tercera propiedad, el Palacio de los Duques de Alba, ubicado en Piedrahita,
que fue edificado por su abuelo Alba, donde recibió con su marido a
personalidades del gobierno, del arte, la cultura y el saber, entre los
que se destacaron el escritor y político Gaspar Melchor de Jovellanos y el pintor Francisco de Goya.


Títulos nobiliarios

En 1776,
a los catorce años, tras la muerte de su abuelo, el XII duque de Alba,
Cayetana se convirtió en la XIII duquesa de Alba, asumiendo la jefatura
de la Casa de Alba, así como todos los títulos inherentes. Cayetana fue la segunda mujer de la saga en ostentar el ducado por derecho propio.


Cayetana enviudó de su primo José Álvarez de Toledo y Gonzaga en 1796,
sin haber tenido hijos de su matrimonio. La falta del esperado hijo
varón que volviera a heredar para los Álvarez de Toledo, en una misma
familia del linaje, las ilustrísimas Casa de Alba y la Casa de Medina
Sidonia fue una verdadera tragedia.


Cayetana, si bien no tuvo descendencia directa, al final de sus años adoptó a una niña negra, a la que llamó María de la Luz.


De 1776 hasta su fallecimiento, en 1802, Cayetana ostentó los siguientes títulos, inherentes a la jefatura de la Casa de Alba:


Además, por el matrimonio con su primo y su posterior viudez, llevó
los títulos de la Casa de Medina Sidonia, como consorte sin descendencia
directa:


De esta forma Cayetana fue la persona que más títulos de nobleza ostentó en la España de principios del siglo XIX.
De la Casa de Alba recibió treinta y un títulos a los que
posteriormente sumó veinticinco más, provenientes estos últimos de la
Casa de Medina Sidonia. En total la aristócrata ostentó cincuenta y seis
títulos nobiliarios.


La ausencia de un hijo, en especial varón, que conservase el apellido
de los Álvarez de Toledo y la totalidad de los títulos de ambos linajes
familiares tuvo como consecuencia que, después de su fallecimiento, los
títulos de su marido recayeran en el hermano de éste, Francisco de Borja Álvarez de Toledo y Gonzaga, mientras que la mayoría de los de Cayetana pasaran a manos de su pariente, Carlos Miguel Fitz-James Stuart y Silva o Carlos Miguel Fitz-James Stuart y Fernández de Híjar-Silva (1794-1835), VII duque de Berwick y VII duque de Liria y Jérica, quien era el sobrino-bisnieto de Fernando de Silva y Álvarez de Toledo, XII duque Alba de Tormes y abuelo de Cayetana.


A partir de entonces la Casa de Alba tuvo por su residencia madrileña el Palacio de Liria (que hasta entonces había sido la de los Berwick)
ya que las dos anteriores residencias capitalinas de los Alba dejaron
de pertenecer al ducado: el Palacio de la Moncloa fue adquirido por el
rey Carlos IV
juntamente con la huerta para añadirlos al Real Sitio de la Florida
que, a partir de entonces, fue conocido como el Real Sitio de la Moncloa
y actualmente es la sede de la Presidencia del Gobierno de España y la residencia oficial del Presidente y su familia; por su parte el Palacio de Buenavista pasó a manos de Godoy y actualmente es Cuartel General del Ejército.


Mecenazgo y rivalidades


Cayetana de Silva-Álvarez de Toledo, retratada por Goya en 1797.
Cayetana fue una de las primeras mecenas del pintor español Francisco de Goya y la mujer más controvertida de su época, debido a su hermosura, riqueza, sensualidad y vida liberal.


La vida de la aristócrata fue una constante trama de historias
propias de la literatura novelada. Hay quienes le atribuyeron un romance
con Goya, quien la retrató en varios de sus cuadros y quien se sintió
desengañado por su carácter caprichoso. Algunos, en cambio, negaron
cualquier posibilidad de relación amorosa entre ellos, por la
desigualdad social que les separaba. Otros apuntaron a que posó para el
cuadro La maja desnuda, aunque otras fuentes coincidieron en en que la modelo fue Pepita Tudó, amante del favorito Manuel Godoy
y luego su segunda esposa. Esta hipótesis es la más creíble ya que fue
Godoy quien le encargó la pintura a Goya y fue su primer propietario
conocido; por otro lado, el aspecto de la duquesa (conocido por varios
retratos) difiere de la maja, de estatura más baja y formas más redondeadas.


Los datos reales y los novelescos se entremezclaron en la biografía de la duquesa. Se ha sostenido que sentía atracción por toreros y demás hombres de condición social inferior, y que incluso salía por las noches, vestida de maja, para disfrutar de diversiones vedadas a las damas respetables.
Su carácter imprevisible contribuyó a este mito: era cariñosa con niños
y pobres pero al mismo tiempo tenía veleidades caprichosas, de derroche
y ostentación. Su idiosincrasia la hizo rivalizar con otras damas
destacadas de Madrid, como la duquesa de Osuna, María Josefa Pimentel o la vizcondesa de Bearne, María Ana de Abad, ambas famosas y encumbradas nobles aunque de menor estirpe que Cayetana.


La duquesa de Alba compitió directamente con la propia reina de España, María Luisa de Parma, esposa del rey Carlos IV, en una época muy difícil para el sistema monárquico en general y la monarquía española
en particular del que no escapó tampoco la nobleza. Rivalizaban por
sorprender en atuendo y lujos, para lo que importaban vestidos
exclusivos de París.
En una ocasión, Cayetana plagió un diseño pensado para la reina, y
vistió con la misma ropa a sus criadas, con el único propósito de
ridiculizarla.


La pugna entre ellas se evidenció cuando, en 1795 su esposo –el duque de Medina Sidonia– se sumó a la rebelión iniciada por el brigadier de la Real Armada, Alejandro Malaspina, que fracasó en la intentona de expulsar de la corte a Manuel Godoy, valido
del rey Carlos IV y favorito de la reina María Luisa. Luego la reina
atribuyó a Cayetana su intención por acaparar la atención de Manuel
Godoy, quien había ascendido como político con la protección de la reina
pero que presuntamente también habría tenido relaciones con la duquesa,
cuando era ya viuda.


Fallecimiento

Cayetana murió repentinamente en 1802, a los cuarenta años, en su Palacio de Buenavista, víctima de una fiebre.


Godoy, quien no se olvidó de su enemistad con su esposo –el fallecido
duque de Medina Sidonia– llevó a cabo la expropiación de varias de sus
propiedades, entre ellos el Palacio de Buenavista, en 1807, cuadros y joyas de la colección ducal. Así, un gran número de sus famosas obras pasaron a sus manos, como la Venus del espejo de Velázquez y La educación de Cupido de Correggio (ambos ahora en la National Gallery de Londres). Carlos IV hizo lo propio con el Palacio de la Moncloa.


Su último testamento, conservado en el Archivo Ducal de la Casa de
Alba, instituía como herederos universales de sus bienes libres a su
hermanastro y primo, Carlos Pignatelli de Aragón y Gonzaga, a su niña adoptada, María de la Luz, al hijo del pintor Goya, Javier de Goya y Bayeu y a buena parte de sus criados y sirvientes.3 Por otro lado, los bienes y títulos que conformaban la Casa de Alba recayeron entonces en la Casa de Liria y Jérica, aunque con alguna excepción, ya que la Casa de Oropesa quedó incorporada en la Ducado de Uceda, en la figura de Andrés Manuel Alonso Pacheco Téllez-Girón y Toledo, XV Conde de Oropesa, VII Duque de Uceda y VII Marqués de Belmonte.


Exhumaciones

El 17 de noviembre de 1842, con motivo del traslado sus restos mortales desde su sepultura original en la capilla de los Alba en la iglesia del Salvador y San Nicolás al cementerio de la Sacramental de San Isidro,
se descubrió que el cuerpo de Cayetana había sido parcialmente
mutilado: tenía las piernas serradas y le faltaba un pie. Al parecer, al
ser colocada en el ataúd, su altura impedía la correcta postura y
tuvieron que serrarle los pies para que cupiese en el féretro.


En 1945, el cadáver de la duquesa fue exhumado por segunda vez y sus restos sometidos a autopsia. Su muerte4
fue atribuida a una meningoencefalitis de origen tuberculoso, lo que
descartó el presunto envenenamiento por parte de Manuel Godoy siguiendo
las instrucciones de la reina María Luisa de Parma.


Ancestros

Bibliografía

Filmografía

Galería de imágenes

Véase también

Notas y referencias

Notas


  1. El
    nombre completo de la duquesa, con la pléyade de apellidos que le
    imponían los mayorazgos de su casa, fue María del Pilar, Teresa,
    Cayetana de Silva, Álvarez de Toledo y Portugal, Beaumont y Navarra,
    Haro, Sotomayor, Guzmán, Fernández Manrique, Acevedo, Fonseca, Zúñiga,
    Enríquez de Ribera y de Cabrera, Sandoval y Rojas, Córdoba, Monroy,
    Ayala y la Cerda. [1]

Referencias


  • Reyes. Luis. Duques, duquesas y consortes. Tiempo. 22 / 09 / 2011. http://www.tiempodehoy.com/sociedad/duques-duquesas-y-consortes.

    1. Tortella, Jaume (2010). «Cayetana de Alba: la duquesa seducida por el pueblo». Historia National Geographic (74). 1696-7755D , 14-19.

    Bibliografía

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    • Bird, Wendy (2000). «Two rumours concerning the Duchess of Alba: Volaverunt and Sueño de la mentira y la ynconstancia». Gazette des Beaux-Arts (en inglés) (París) (136): 197–214.
    • Blanco Soler, Carlos (1946). Esbozo psicológico, enfermedades y muerte de la duquesa María del Pilar Teresa Cayetana de Alba. Madrid.
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    • Chan, Victor (1981). «Goya, the Duchess of Alba and Fortuna». Arts (en inglés) (Nueva York) (56): 132–138.
    • Crowe, Ann Glenn (1989). The art of Goya and the Duchess of Alba (1792-1802): minor themes and major variations (en inglés). Stanford: Universidad de Stanford.
    • Encina, Juan de la (1939). «La duquesa de Alba y la gracia goyesca». El mundo histórico y poético de Goya (Ciudad de México). Consultado el 22 de enero de 2015.
    • Ezquerra del Bayo, Joaquín (1959). La duquesa de Alba y Goya. Estudio biográfico y crítico. Madrid: Aguilar.
    • Glendinning, Nigel (2004). «La duquesa de Alba». El retrato español (Madrid: Museo del Prado): 361–362.
      • La década de los Caprichos. Retratos 1792-1804. Madrid: Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. 1992. ISBN 9788487181108.
    • March, José María, S. J. (1946). Bodas de la duquesa de Alba con el marqués de Villafranca y de los Vélez, 1775. Madrid: Hauser y Menet.
      • «Los duques de
        Alba, marqueses de Villafranca, don José Álvarez de Toledo y doña María
        Teresa Cayetana de Silva, señores del Palau, vistos desde Barcelona,
        1775-1802». Boletin de la Real Academia de la Historia (Madrid) (CXLIX): 153–243. 1961.
    • Matilla Tascón, Andrés (1979). «La herencia de duquesa de Alba». Hidalguía (Madrid: Instituto Salazar y Castro) (152): 97–125.
    • Mena Marqués, Manuela; Mühle-Maurer, Gudrun (2006). La duquesa de Alba, «musa» de Goya, el mito y la historia. Madrid: Museo del Prado. ISBN 8495241528.
    • Nicolás Martínez, María del Mar (2009). «Galas y regalos para una novia, a propósito de la boda de María del Pilar Teresa Cayetana de Silva, duquesa de Alba». Congreso Internacional Imagen y Apariencia. 19 de noviembre de 2008 - 21 de noviembre de 2008. Murcia: Universidad de Murcia, Servicio de Publicaciones. ISBN 978-84-691-8432-5. Consultado el 22 de enero de 2015.
    • Nörvich, Kurt von (1959). La duquesa de Alba (la maja duquesa). Barcelona: AHR.
    • Scmidt, Marie-France (1965). La duchesse d’Albe, noble dame de l’Espagne (en francés). Lausana: Éditions Rencontre.
    • Symmons, Sarah (2002). «La mujer vestida de blanco: el primer retrato de la duquesa de Alba». Goya (Madrid: Fundación Amigos del Museo del Prado): 49–62. ISBN 84-8109-355-6.
    • Waldmann, Susann (1998). Goya and the Duchess of Alba (en inglés). Múnich: Prestel. ISBN 3791319841.

    Enlaces externos



  • Nobleza española: grandeza inmemorial



  • CALLEJA, CONCEPCIÓN: El último beso de Cayetana de Alba, 2001.



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